MARBELLA: julio 2011

Edificio construido en la calle del mismo nombre, sobre un terreno de acusada pendiente, razón por las que su interior queda marcado por un continuo cambio de niveles, tiene su origen como hospital en la ausencia de herederos del que fuera Alcaide de la Fortaleza y Regidor Perpetuo de Marbella desde 1536 hasta su muerte el 17 de octubre de 1573, Alonso de Bazán, en cuyo testamento y en ausencia de beneficiarios, preveía la función hospitalaria de su casa principal y, así es como el 21 de agosto de 1604 agotada la descendencia con el fallecimiento de su hijo Fernando de Bazán, comienzan las obras del Hospital.

Alonso de Bazán quería la perpetuidad del Hospital, y por ello era consciente de la necesidad de mantener los bienes que dejaba como forma de financiación, por lo que estableció en el testamento:

"...y tenga perpetuamente, para siempre jamás, todos los dichos bienes juntos y vinculados, con las mismas cláusulas y fuerzas de no poderse enajenar, dividir, ni partir, ni en ninguna manera de su uso contenidas y especificadas".

Con el tiempo este Hospital fue perdiendo sus funciones y, una vez clausurado, en la década de 1950 se instalaron algunos vecinos, que entre otras cosas realizaron paredes que dividían los techos artesonados. Queda así evidenciado que no se respetó el testamento de Alonso de Bazán.

En el año 1989 el edificio Hospital Bazán fue restaurado por la Junta de Andalucía, y catalogado como Monumento Bien de Interés Cultural en el año 2004. En la actualidad es la sede del Museo del Grabado Español Contemporáneo.

Primera página del testamento de Alonso de Bazán.