MARBELLA: Calle Arte

En esta calle construida en la década de los 60, se encuentra como protagonista indiscutible La Alcazaba, cuya muralla Oriental lindaba con el Arroyo de la Represa o Río de las Tenerías, donde se encontraba la barbacana (una estructura defensiva que servía de soporte al muro) y que permaneció en pie hasta 1970.

Al margen de los últimos descubrimientos en el patio de armas (actual colegio), que apuntan a que los orígenes de Marbella podrían remontarse a los primeros siglos de la dominación romana, se puede afirmar que el actual Casco Histórico es consecuencia del establecimiento y evolución de un asentamiento musulmán a mediados del siglo X.

Esta Alcazaba era un elemento prominente dentro de la Medina, y sus muros llaman poderosamente la atención en las calles Arte, Salinas, Trinidad, Portada y su acceso original en la calle Carmen.

El acceso al recinto bajo de La Alcazaba, a través de la calle Arte, daba acceso al alojamiento de una guarnición militar.

La denominada “Tierra de Marbella” comprendía las poblaciones de Ojén, Istán, Benahavís, Alicates, Nagüeles, Cortes, Almáchar, Tramores, Daidín (desaparecida), Montemayor, Arboto, Fontanillas, Benamarín, Arbunjendín, Benimaydu, Velerín, Benidrís, Benibolás, Montenegral y Esteril.

En la obra “Conjeturas de Marbella”, publicada en Córdoba en 1781, escrita por el eclesiástico Pedro Vázquez Clavel, nacido en Marbella y del que no sabemos casi nada, decía que …por los cimientos de la ciudad se podía deducir que la fundaron los fenicios, y que el nombre original fenicio fue “Castillo de la Madera”, para los cartagineses fue “Marbella”, para los romanos “Barbesola”, y para los godos y los moros fue de nuevo “Marbella”… también asegura que el nombre Marbella vendría del General Cartaginés Maharbal (S III a.C.), mano derecha del General Anibal, que habría reconstruido la población, pero todas esas eran y siguen siendo conjeturas.

Durante la época nazarí, Marbella dependía del reino de Granada, hasta que en 1485 fue recuperada por los Reyes Católicos, marcando una transformación urbana, desembocando en la Marbella actual, quedando de ese período el casco viejo, algunos restos de las murallas y dos torres defensivas de La Alcazaba.

En 1814, el Ayuntamiento dispuso el cementerio en el patio de armas del recinto, siendo clausurado en 1885. En la segunda mitad del siglo pasado, se construyeron dos colegios, uno público y otro privado, impulsados por el Monseñor Rodrigo Bocanegra, en el interior de La Alcazaba, y una veintena de casas, produciéndose un daño irreparable al patrimonio. Del mismo modo, en el año 1945, los muros de La Alcazaba que lindan con la calle Arte, fueron decorados con almenas que nunca existieron, dando una imagen errónea.

Año 1941