Esta calle debe su nombre a Enrique del Castillo y Pez, militar de ultramar, nacido en Bilbao en 1876. Vive su infancia y parte de la adolescencia en Cuba, en donde su padre era militar.
Enrique del Castillo y Pez ingresó voluntario en el Ejército con dieciséis años haciéndose soldado de infantería tras ingresar en la Academia Preparatoria Militar de La Habana, hasta que en 1899, tras la guerra de Cuba entre España y Estados Unidos donde alcanzó el grado de Teniente, emprende el retorno a España embarcando en el vaporcorreo “Isla de Panay” desde el puerto de Matanzas y desembarcando en Santander, desde donde marchó en ferrocarril a Málaga con dos meses de permiso como repatriado de Cuba.
Una vez en España, ingresa en el Cuerpo de Carabineros, y recorre varios destinos como Barcelona, Valencia, Huesca, Alcoy, Algeciras, Cádiz o Estepona, antes de ser destinado en 1920 a Marbella con motivo de su ascenso a Capitán, donde tiene la iniciativa de constituir el “Casino de Marbella” ubicado en la calle Valdés y fundarlo con la primera actividad social el 2 de enero de 1921, consistente en una comida a los niños pobres, en la plaza de toros, que entonces se encontraba en la avenida Puerta del Mar.
La virtud de Enrique del Castillo unió voluntades en una sociedad fragmentada por ideas políticas, permitiéndole desplegar otras iniciativas sociales, como la “Agrupación de la Asociación Nacional de Exploradores de España” o la “Sociedad Amigos de Marbella”. Es a través de esta sociedad desde donde se consigue poner aceras y pavimento de cemento en las principales calles, por lo que es nombrado hijo predilecto de Marbella.
En noviembre de 1922, es destinado a Fuengirola, y como muestra de consideración, el Ayuntamiento acordó en 1923 dar su nombre a la calle que transcurre entre la Plaza José Palomo y la “estatua del caballo” de la calle Tetuán, siendo esta la primera en disponer de aceras gracias a su iniciativa.
En 1938 se retiró del servicio activo por edad, falleciendo en 1966 en Málaga.
Año 1923
Enrique del Castillo y Pez
Vista de la calle Enrique del Castillo, desde la Avenida Severo Ochoa.
Año 1923
Instante en el que se procede al descubrimiento de la placa que da nombre a la calle.
La vivienda aun resiste al mal llamado "desarrollo urbanístico".
25 de febrero de 2011
25 de febrero de 2011
Año 1961
Peluquería Guerrero.
Cincuenta años después sigue manteniendo su actividad en el mismo sitio
Si que es verdad, aun esta la peluquería Guerrero, aunque yo nunca tuve la ocasión de arreglarme en esta "barbería", como también se les denominaba.
ResponderEliminarUn saludo Marbella.